viernes, 3 de abril de 2009

De vuelta de Mérida


La carretera es uno de los decorados de mi vida. La itinerancia, la provisionalidad. Ir y venir sin estar del todo en ningún sitio.


Hoy, en el viaje de vuelta desde Mérida, hice unas cuantas fotos para intentar detener lo permanentemente en movimiento.







2 comentarios:

  1. Sin querer ser pedante, ese tipo de fotos responde a lo que Michael Butor llama "los paisajes itinerantes", los que se ven fugazmente desde las ventanillas. Supongo que son un poco "hijos del progreso".
    Saludos.

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  2. Me solidarizo contigo en esto de la itinerancia. Me gustó eso de "lo permanente en movimiento" que Thales podía suscribir con gusto. Boas ferias. Un abrazo. Tino

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